Debido a la intensificación del conflicto, muchas actividades de las actividades médicas esenciales que realizamos en Sudán podrían suspenderse debido a la imposibilidad de incorporar nuevo personal internacional. También sigue siendo muy complicado trasladar suministros esenciales donde más se necesitan.
El personal humanitario en Sudán está trabajando bajo una presión extrema a causa del conflicto
Reproducimos las declaraciones del doctor Ahmed Abd-elrahman, médico sudanés que ha trabajado con nuestra organización durante más de 17 años, en contextos como Somalia, Pakistán y Libia. Actualmente, es Director de Operaciones en Bruselas y está en contacto directo con nuestros equipos en Sudán:
“Tal y como está la situación hoy, me preocupa seriamente que, sin personal adicional y sin capacidad de trasladar suministros esenciales allí donde se necesitan, muchas actividades que salvan vidas tengan que suspenderse.
Nuestro equipo quirúrgico en Jartum, por ejemplo, lleva más de 10 días operando sin parar. Si no somos capaces de rotar a otro equipo, puede que no sea posible continuar con estas actividades cruciales.
Nuestros equipos atestiguan diariamente el impacto directo de los continuos combates en la población de Jartum y Darfur, y de las consecuencias sanitarias de los desplazamientos en zonas como Wad Madani. En Wad Madani, según Al-Jazeera, el sistema sanitario está sometido a una presión extrema.
Nuestras clínicas móviles han atendido a más de 1.000 pacientes en pocas semanas. En Jartum, nuestro equipo quirúrgico ha tratado a más de 400 pacientes traumatológicos desde el 9 de mayo. Estas actividades están salvando vidas y es crucial que sigan funcionando eficientemente».
Muchas de nuestras instalaciones médicas en Sudán han sido saqueadas
Continúa el doctor Ahmed Abd-elrahman: «Aunque hemos podido introducir algunos suministros en el país, el acceso sigue siendo muy difícil. No ha sido posible mover estos suministros libremente desde los puntos de entrada hasta los lugares donde se necesitan. Incluso cuando teníamos suministros almacenados en el país, los saqueos y ataques a centros sanitarios y almacenes han reducido significativamente nuestros recursos. Es crucial que los suministros puedan seguir entrando en el país y circulando libremente.
Y lo que es aún más preocupante, en todo Sudán muchos centros médicos se han quedado sin personal, ya que la gente huye por seguridad. El poco personal humanitario que ha podido entrar en Sudán está trabajando bajo una presión extrema y en las últimas dos semanas ha sido muy complicado reforzar nuestros equipos incorporando más personal internacional.
Aunque recientemente hemos conseguido algunos visados, necesitamos urgentemente más. Sin nuevo personal y sin la posibilidad de trasladar suministros esenciales en el país, muchas operaciones humanitarias en muchas partes del país pueden paralizarse. Pedimos a las partes en conflicto que garanticen el acceso de la ayuda humanitaria y nos permitan asistir a la población sudanesa”.