Al menos seis personas murieron y otras ocho resultaron gravemente heridas, el pasado jueves, durante el ataque al pueblo de Yebi, en el distrito de Bosso, donde miles de desplazados de la región del lago Chad se han asentado en busca de refugio. Según las autoridades de Níger, el ataque fue perpetrado por el grupo Estado Islámico de la Provincia de África Occidental (ISWAP, por sus siglas en inglés), también conocido como Boko Haram.
A petición de las autoridades sanitarias locales, MSF evacuó a ocho heridos graves al Centro Hospitalario Regional de Diffa, la capital de la región del mismo nombre.Según Naciones Unidas, entre el 1 de enero y el 10 de marzo de 2016, se han producido 20 ataques vinculados a Boko Haram. En la región existe un conflicto permanente entre este grupo y el ejército nigerino.
Durante el ataque, que tuvo lugar la noche del 19 de mayo, el mercado y muchas casas fueron incendiadas. Asimismo, tres tanques gigantes que contienen agua bombeada día y noche en el subsuelo fueron destruidos, así como el generador que permite accionar dicha bomba. Esos tres tanques suministran agua al pueblo y no hay otra fuente de agua gratuita en los alrededores de Yebi.
Impacto en la misión médica
El puesto de salud de MSF en Yebi, que asiste a una población de cerca de 20.000 personas, fue totalmente destruido durante el ataque. Dicho centro atendía una media de 400 consultas médicas cada semana y es el único centro médico de la zona. Lamentablemente, no es el primer ataque a un centro médico donde MSF trabaja en Diffa. En la noche del 2 de mayo, el centro de salud de Ngarwa, también apoyado por la organización, fue saqueado.
“Estamos muy preocupados por el impacto de estos ataques sobre la población y la falta de respeto por las estructuras sanitarias que pone en peligro el acceso a una atención médica de por sí ya limitada en Diffa”, afirma Elmounzer Ag Jiddou, coordinador general de MSF en Níger. “Estamos trabajando para reanudar las actividades tan pronto como sea posible”.
Una campaña de vacunación contra el sarampión que había comenzado justo antes del ataque en el distrito de Bosso ha tenido que posponerse durante unos días. MSF está presente en varios centros de salud en los distritos de Diffa, Nguigmi y Bosso, así como el principal centro de salud materno-infantil de la ciudad de Diffa y en el Hospital de Distrito de Nguigmi. MSF también proporciona asistencia médica en el campo de Assaga y en Chétimari, donde se han refugiado miles de personas. En 2015, MSF realizó más de 142.000 consultas en la región.