Médicos Sin Fronteras (MSF) ha regresado a Pibor con un equipo de 12 trabajadores sanitarios y logísticos para dar respuesta de emergencia tras la violencia intercomuncal desatada la primera semana de enero en este condado del estado de Jonglei. El saqueo de las estructuras de MSF y el clima de incertidumbre son un reto añadido para la organización, que debe ampliar sus actividades de inmediato.
Antes de que la violencia azotase la ciudad de Pibor, MSF ya había evacuado a todo su personal expatriado a Juba, la capital del país, y el personal nacional había abandonado la ciudad para ocultarse en el monte junto a otros habitantes de la misma. Desde el 10 de enero, se desconoce el paradero de 60 de las 155 personas contratadas por MSF en Pibor. La organización está profundamente preocupada por su suerte, al igual que por la de todos los que huyeron para salvar sus vidas.
La incertidumbre es enorme en los alrededores de Pibor, afirma Colette Gadenne, responsable de proyectos de MSF en Sudán del Sur. Muchas personas, entre ellas, muchos de nuestros trabajadores locales, están buscando a familiares perdidos en el monte, temiendo lo peor. Esto y los daños irreparables en materia de medicamentos y material médico a consecuencia de los ataques hacen que sea todo un reto desplegar una respuesta de emergencia efectiva para atender a quienes necesitan asistencia médica urgente.
Reanudar las actividades más urgentes
El hospital gestionado por MSF en la ciudad de Pibor fue saqueado por completo. Aunque el principal edificio de cemento y el tejado están prácticamente intactos, prácticamente todo el equipamiento médico y las existencias de medicamentos han quedado inservibles. MSF está rehabilitando las estructuras para permitir la reanudación de las actividades médicas y ha transportado en avión más de una tonelada de medicamentos y material médico y logístico a la ciudad de Pibor. Se espera que lleguen más suministros en los próximos días.
En estas circunstancias tan restrictivas, MSF ha empezado a proporcionar atención médica de emergencia a las personas que han vuelto a la ciudad. Pero todavía queda mucha gente dispersa que se oculta en una gran extensión de terreno a las afueras de Pibor. Hasta que estas personas hayan retornado, no se podrá tener una idea clara de las necesidades médicas reales. En los próximos días, MSF evaluará las necesidades no médicas y proporcionará una respuesta humanitaria en función del resultado de su valoración independiente.
MSF en Pibor
Desde 2005, el equipo de MSF ha ofrecido atención médica a 160.000 personas en el condado de Pibor, y ha prestado asistencia en otras partes del estado de Jonglei. La organización se compromete a dispensar lo antes posible la atención médica de calidad prestada antes de que se desencadenara la violencia.
MSF ha demostrado su total imparcialidad y neutralidad a lo largo de los años, trabajando en muchas y muy diversas comunidades en Sudán del Sur. En 2011, tres estructuras médicas de la organización fueron objeto de ataques en el estado de Jonglei. MSF condena el ataque deliberado contra estructuras médicas por parte de cualquier grupo armado y se compromete a aportar ayuda médica y humanitaria a la población del estado de Jonglei.