MSF amplía su capacidad para atender a los heridos que requerirán seguimiento en los próximos meses.
Siete semanas después del terremoto del pasado 12 de enero en Haití, que dejó un balance de 300.000 heridos, las necesidades médicas no sólo siguen siendo enormes sino que aumentan: comienza ahora una fase crucial en la cual miles de heridos van a requerir atención médica a largo plazo precisamente cuando algunos proveedores de salud que intervinieron en la fase inicial de la emergencia empiezan a marcharse y a dar de alta a sus pacientes.
Médicos Sin Fronteras está ampliando su capacidad para atender a los muchos heridos que requerirán atención post-operatoria durante los próximos meses, incluyendo cirugía secundaria, seguimiento, fisioterapia y atención en salud mental. En los últimos días, los hospitales públicos y otros equipos sanitarios que se marchan del país han referido ya a más de 200 pacientes a las estructuras médicas de MSF.
La fase de emergencia inmediata puede que haya terminado, pero el trabajo a largo plazo no ha hecho más que empezar y no es menos urgente, advierte la Jefa de Misión de MSF en Haití Karline Kleijer.
Cada día, hay pacientes que necesitan curas, limpieza de heridas, cambio de vendajes, revisión de fracturas mediante radiografía y de fijaciones externas, retirada de escayolas, seguimiento de los injertos de piel, así como cirugía reconstructiva y otras intervenciones especializadas.
La falta de atención postoperatoria o una atención ineficaz puede tener como consecuencia largas hospitalizaciones o incluso provocar discapacidades físicas de por vida, explica el doctor Nico Heijenberg.
Tras semanas de inmovilización como resultado de tracciones, escayolas, fijadores externos y amputaciones, los pacientes sólo consiguen recuperar la movilidad mediante fisioterapia. Además, aquellos que sufrieron amputaciones pueden necesitar intervenciones adicionales para asegurar un buen ajuste de los miembros ortopédicos.
Devolver a los pacientes a sus casas en sus actuales condiciones médicas, y de vida, simplemente no es una opción para nosotros, añade el director del hospital de MSF en el barrio de Saint Louis en Puerto Príncipe, el doctor Michel Janssens. Este hospital de campaña, instalado en un antiguo campo de fútbol, permanecerá allí por lo menos durante un año más.
Otro elemento crítico de la atención postoperatoria es la atención psicológica y el asesoramiento de los pacientes. MSF proporciona servicios de salud mental en toda la ciudad: para la gente que sufrió graves heridas: el apoyo psicológico es tan vital como lo son la fisioterapia o el aprender a vivir con muletas.
Además, los supervivientes del terremoto a menudo experimentan una gran ansiedad a propósito de su futuro. «Era electricista. ¿Quién va a contratar a una persona discapacitada? ¿Cómo encontraré trabajo para mantener a mi familia?, se pregunta uno de los pacientes de MSF, Ricardo, de 33 años, quien sufrió graves quemaduras en las manos.
MSF pronto abrirá estructuras postoperatorias adicionales, que funcionarán por lo menos durante un año, en Puerto Príncipe, Carrefour, Léogâne, y Jacmel, con un total de aproximadamente 1.000 camas.