La situación de los refugiados de Darfur, Sudán, que hace poco llegaron a la región de Birak es muy preocupante.
Atrapados en un contexto de seguridad extremadamente volátil, la situación de los refugiados de Darfur que hace poco llegaron a la región de Birak, Chad, es muy preocupante. La vida de estos refugiados aún está amenazada por los constantes enfrentamientos a pocos kilómetros de sus asentamientos, sin mencionar la situación en la que viven muchas personas que permanecen en zonas directamente afectadas por la violencia en Darfur. La inseguridad también supone un obstáculo para la ayuda a esta zona y si los refugiados no reciben asistencia básica en las próximas semanas, su situación sanitaria podría empeorar con gran rapidez.
La situación en la región de Birak, al este de Chad, sigue siendo extremadamente volátil. Actualmente, los enfrentamientos se están produciendo a pocos kilómetros de la frontera. La población que se ha asentado en la zona de Birak todavía corre peligro. Algunos refugiados han reportado agresiones perpetradas contra las mujeres que regresan a Sudán por la noche en busca de agua, ganado o miembros de sus familias.
En Darfur, los equipos de MSF todavía no han podido acceder a la zona de Seleia y evaluar la situación tras los recientes ataques en la región. Según los refugiados en Chad, algunas personas buscaron refugio en las montañas del Jebel Moon, una zona donde el lunes se reportaron combates, lo que hace temer por la suerte de los civiles en la zona.
Ayuda de emergencia e inseguridad
Tras los recientes bombardeos y ataques en la zona de Seleia, en Darfur, varios miles de personas buscaron refugio en el país vecino, Chad, concretamente en la zona de Birak. Las personas que consiguieron cruzar la frontera están muy traumatizadas. Muchas familias viven ahora separadas sin noticias de los que se han quedado atrás en Darfur.
Los equipos de MSF se pusieron de inmediato a evaluar las necesidades de los refugiados en la zona de Birak. Entre 7.000 y 8.000 personas han sido identificadas, esparcidas entre varios asentamientos en esta zona. Algunas de ellas han podido llevarse algunas de sus pertenencias consigo (animales, algo de comida) y han recibido asistencia de la población local. No obstante, su situación sigue siendo precaria.
MSF y unas pocas organizaciones han proporcionado la asistencia más urgente, asegurando atención médica y distribuyendo alimentos y artículos de primera necesidad como lonas de plástico, bidones, jabón y mantas. La semana pasada, sin embargo, los equipos tuvieron que ser evacuados debido a la inseguridad. Si los refugiados no reciben asistencia básica en las próximas semanas, su situación podría agravarse rápidamente.
En el este de Chad, MSF proporciona atención primaria y secundaria de salud, apoyo psicosocial, y agua y saneamiento a refugiados sudaneses, desplazados y residentes chadianos en Abeché, Adré, Farchana, Goz Beïda, Dogdoré, Guereda, Iriba y Am Timam. Desde Guereda, nuestros equipos dan apoyo a cuatro centros de salud vecinos incluyendo uno en Birak.
