En 2021 tuvimos muchos desafíos: desde la crisis humanitaria en el mar Mediterráneo, en donde trabajamos con nuestro barco Geo Barents, hasta el desplazamiento masivo de migrantes venezolanos en América Latina o el conflicto en Afganistán. En medio de los momentos más difíciles, en MSF buscamos soluciones concretas para aliviar el sufrimiento de nuestros pacientes. Aquí les presentamos algunos casos positivos que nos dan esperanza y refuerzan nuestro compromiso de cara al año que comienza.
1. Ayudamos a controlar la malaria en zonas del estado de Sucre, Venezuela
Desde el año 2019 y hasta la fecha, la incidencia de casos de malaria en las zonas en donde estamos presentes y trabajamos en colaboración con las autoridades locales, en el estado de Sucre, al noreste de Venezuela, ha disminuido en un 80%. En el primer semestre del año 2019 se reportaban 8.566 casos de la enfermedad en estas áreas, mientras que en el 2021 se reportaron 1.641 durante el mismo período.
En esta región, apoyamos al Programa Nacional de Malaria de la Dirección Regional de Salud Ambiental, para disminuir y controlar la enfermedad. Esta es una de las regiones con mayor incidencia de malaria en el país y por eso, desde 2019, nos enfocamos en tres ejes fundamentales: diagnóstico y tratamiento, promoción de la salud y control vectorial.
El control vectorial se refiere a todas las estrategias que se implementan para evitar la transmisión de enfermedades, a través de los insectos que la portan, los llamados vectores. Pero la práctica es más compleja de lo que parece, pues para tomar medidas realmente efectivas es necesario estudiar absolutamente todo sobre estos mosquitos.
El biólogo Melfran Herrera es especialista en control de insectos transmisores de enfermedades con más de 20 años de experiencia, y trabaja con nosotros como Supervisor de Control Vectorial. Él busca larvas de mosquitos Anopheles para conseguir información que permita diseñar estrategias efectivas para la prevención de la malaria.
Leer más sobre el biólogo de MSF que estudia mosquitos en Venezuela para prevenir la malaria
2. Probamos enfoques innovadores para resolver problemas de higiene femenina en contexto de desplazamiento
El acceso a una buena higiene menstrual es clave para la salud y bienestar de las mujeres. Pero durante crisis humanitarias, no siempre es fácil cubrir estas necesidades. Los productos para la menstruación pueden ser escasos o estar completamente ausentes, sumado a la falta de letrinas, las malas condiciones de higiene y la falta de suministro de agua y de privacidad que pueden complicar aún más las cosas, sobre todo en contextos de desplazamiento.
Este año, nuestros equipos presentaron un enfoque innovador para encontrar una solución culturalmente apropiada a este problema: ropa interior menstrual; es decir, ropa interior lavable y duradera capaz de absorber el flujo menstrual sin la necesidad de ningún otro producto.
Nuestro primer proyecto piloto fue con nuestras colegas congoleñas en la ciudad de Bukavu, en Kivu Sur, en República Democrática del Congo, con quienes discutimos creencias y tabúes sobre la menstruación. Aprendimos así que uno de los aspectos clave en este sentido para las mujeres de esta región es la privacidad. Después de esta sesión, distribuimos la ropa interior para menstruación y tres meses después, volvimos a reunirnos para discutir su experiencia con el producto. La retroalimentación fue positiva en general. La ropa interior era cómoda y limpia, fácil de usar y lavar y, lo más importante, abordaba el importante tema de la privacidad.
Para evitar dar por sentados nuestros hallazgos iniciales, decidimos llevar esta idea a otras zonas a lo largo del año para continuar aprendiendo más sobre los desafíos de la higiene menstrual y pensando en nuevas soluciones y enfoques.
Leer más sobre el proyecto de la ropa interior menstrual en la República Democrática del Congo
3. ¡Convencimos a Máximo de vacunarse!
Máximo Valeriano Martinez, de Cochabamba, dudaba sobre si vacunarse o no, debido a que había escuchado y leído mucha desinformación en su celular: que la vacuna era peligrosa, que la enfermedad no existía, que querían envenenarlos. Después de hablar con nuestros equipos, decidió darse la vacuna. «Ustedes me han hablado… y yo confío en ustedes, ahora ya puedo vacunarme”, dijo Máximo en su momento.
Unos de los ejes importantes de nuestra intervención en Bolivia consistió en combatir la desinformación. «La fragilidad del sistema de salud en la lucha contra el coronavirus es un problema (en Bolivia) pero otro de los factores que influye en la situación y postura de la población frente al virus es la desinformación y confusión general sobre el COVID-19«, resumía Karen Zambrana, nuestra encargada de las actividades de promoción de la salud en Bolivia.
Leer más sobre cómo enfrentamos los mitos sobre COVID-19 en Bolivia
4. Resultados de un ensayo clínico ofrecen esperanza a pacientes con tuberculosis resistente
Se trata de un nuevo tratamiento más corto y menos agresivo que podría curar a hasta un 89% de los pacientes con tuberculosis resistente, de acuerdo a los resultados de TB-PRACTECAL, un ensayo clínico que hemos liderado desde MSF. El nuevo tratamiento tiene seis meses de duración, es totalmente oral y, como hemos comprobado, es más seguro y eficaz para tratar la tuberculosis resistente a la rifampicina que los tratamientos actuales. Estos resultados marcan el comienzo de un nuevo capítulo para las personas con tuberculosis resistente a los medicamentos (TB-DR), que actualmente se enfrentan a regímenes de tratamiento prolongados.
El estándar de atención actual puede tardar hasta 20 meses en completarse, e incluye inyecciones dolorosas y la toma de hasta 20 píldoras diarias que pueden causar efectos secundarios graves. Estos extenuantes regímenes de tratamiento sólo curan a una de cada dos personas y pueden tener un efecto catastrófico en su salud física y mental, así como en su vida financiera y social.
En este nuevo régimen que se probó fue de seis meses de bedaquilina, pretomanida, linezolid y moxifloxacina (BPaLM) y se realizó en siete lugares de Bielorrusia, Sudáfrica y Uzbekistán. Durante el tratamiento, los resultados de los ensayos mostraron que los nuevos fármacos produjeron, de forma significativa, menos efectos secundarios importantes.
“Como uno de los proveedores no gubernamentales más grandes de tratamiento para la tuberculosis en todo el mundo, nos entusiasma lo que estos resultados significarán para las personas con tuberculosis multirresitente”, dijo el Dr. Christou, presidente internacional de MSF.
Leer más sobre esta gran noticia para pacientes con tuberculosis resistente
5. Diabetes: descubrimos que una variedad de insulinas no requiere refrigeración (como se creía)
Un nuevo descubrimiento ayudará a mejorar el tratamiento de la diabetes de personas refugiadas mediante una variedad de insulinas que pueden almacenarse a temperatura ambiente, incluso en ausencia de acceso a la refrigeración.
Buscando formas para mejorar la atención de pacientes con diabetes en entornos de escasos recursos, un estudio conjunto de MSF y la Universidad de Ginebra, publicado el 3 de febrero en PLOS ONE, ha demostrado que una variedad de insulinas pueden almacenarse a temperaturas que oscilan entre los 25 y los 37 grados celsius por un periodo de hasta cuatro semanas.
Esto es relevante teniendo en cuenta que las estrictas recomendaciones para el almacenamiento de la insulina son difíciles de seguir en las regiones tropicales y son aún más desafiantes en contextos de conflictos y emergencias humanitarias, lo que supone una carga adicional para las personas que deben controlar su diabetes.
Leer más sobre el nuevo descubrimiento para el tratamiento de la diabetes