Junto a las instituciones de salud locales, la organización internacional médico-humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) elaborará un modelo de atención integral desde el primer nivel de atención hasta los niveles superiores que se integre horizontalmente al sistema de salud existente.
“A través de este modelo de colaboración se intenta conseguir un mayor empoderamiento de las autoridades nacionales y, como consecuencia, mayor sostenibilidad del programa en el tiempo”, afirma Martín Cazenave,Coordinador General de MSF en el país. “La idea es que el modelo de intervención sea replicado en el futuro en otros municipios ya sin la participación directa de MSF”, añade Cazenave.
El pasado mes de marzo, MSF ofreció un taller introductorio al diagnóstico y tratamiento del Chagas dirigido al personal sanitario del municipio en el que participó también personal de municipios periféricos.
“El entusiasmo y la participación superó ampliamente nuestras expectativas. Asistieron alrededor de 130 personas. Si en algún momento subestimamos el interés del personal sanitario de la zona en Chagas, aquí quedó demostrado que estábamos equivocados” agrega Cazenave.
Esta formación forma parte de las actividades que la organización desarrollará en cuanto a capacitación además de dar apoyo técnico al sistema de salud para mejorar el acceso al diagnóstico y tratamiento.
El plan es que el nuevo proyecto de Monteagudo dure dos años, hasta finales de 2016.
Chuquisaca es en la actualidad uno de los departamentos de mayor endemicidad del país, junto con Cochabamba, Santa Cruz y Tarija. Son estas áreas de dónde el vector principal (T. infestans) es originario, presentando gran capacidad adaptativa, lo que hace más difícil la lucha vectorial, así como también la lucha integral en contra de la enfermedad.
MSF trabaja en Bolivia desde 1986. Se estima que más de un millón de personas padecen la enfermedad en Bolivia. Desde el año 2002, MSF trabaja ininterrumpidamente en Chagas donde menos del 4% de los enfermos reciben el tratamiento que necesitan.
La enfermedad de Chagas (EC) es una infección parasitaria, sistémica, crónica y es endémica en 21 países de América, aunque la migración de personas infectadas pueden llevarla a países no endémicos como se ha visto en los últimos años. Se estima que en América hay cerca de 100 millones de personas en riesgo de infectarse y unos 8 millones infectadas. De estos últimos, más de 95% no ha tenido acceso al diagnóstico y mucho menos al tratamiento específico. Se calcula que hay alrededor de 56.000 nuevos casos anuales, ocasionando 12.000 muertes anuales.
Desde 1999, MSF ha ofrecido diagnóstico y tratamiento gratuitos para la enfermedad de Chagas. Los proyectos han sido desarrollados en Honduras, Nicaragua, Guatemala, Colombia, Bolivia, Paraguay y más recientemente en Italia y México.