Médicos Sin Fronteras ha seguido de cerca la evolución del acceso a medicamentos esenciales, métodos de diagnóstico y vacunas a lo largo de 2010. El presente informe repasa diez historias positivas y desafíos pendientes que impactarán en la salud de millones de personas en los países en desarrollo.
Entre las historias positivas de 2010, destaca el desarrollo de dos nuevas herramientas médicas cruciales: una nueva vacuna contra la meningitis, que podría prevenir las epidemias en Africa si se acompaña de la suficiente voluntad política como para utilizarla ampliamente en los 25 países afectados, y una nueva prueba para la tuberculosis que podría mejorar el diagnóstico y reducir el tiempo de detección de las formas de la enfermedad resistentes a los medicamentos (de casi tres meses a menos de dos horas).
Además, las últimas investigaciones sobre el tratamiento de la malaria aguda en niños despeja cualquier duda sobre la pertinencia de utilizar inyecciones de artesunato en lugar de la quinina, lo que debe traducirse ahora en modificaciones de las pautas y protocolos de tratamiento. Tras varios años de campaña por parte de MSF, se creó el Pool de Patentes de Medicamentos, que ha recibido un fuerte respaldo político de EEUU, pero que ahora debe también ser respaldado por las compañías farmacéuticas. En 2010 se consolidaron también mejoras en la calidad de la ayuda alimentaria dirigida a niños menores de 2 años: grandes donantes internacionales, como España, han empezado a aplicar cambios en sus protocolos para incluir la alimentación terapéutica y suplementaria como forma de tratamiento y prevención de la desnutrición infantil.
Pero 2010 también estuvo marcado por algunos contratiempos y desafíos sin respuesta. Haciendo caso omiso de las crecientes evidencias de que un tratamiento precoz y de calidad del VIH es la mejor forma de hacer frente a la pandemia, los donantes internacionales de fondos están dando la espalda al sida, estancando la financiación de programas específicos y poniendo en peligro los avances logrados en la última década. Al mismo tiempo, no es de esperar que los fármacos más nuevos vayan a reducir sus precios como ocurrió con las primeras terapias antirretrovirales, debido a las agresivas políticas comerciales impulsadas por la Unión Europea.
También cabe destacar el resurgimiento del sarampión, con brotes en varios países africanos que se han saldado con miles de muertos, lo que pone de manifiesto que la cobertura vacunal está fallando en muchas regiones. Otra noticia negativa es que los esfuerzos para luchar contra los medicamentos falsificados están errando el tiro y, en lugar de proteger a los pacientes de los peligros de los medicamentos de mala calidad, están perjudicando el acceso a medicamentos genéricos asequibles que son la única opción para millones de enfermos sin recursos en el mundo. Finalmente, 2010 no supuso mejoras en el olvido de los pacientes de enfermedades tropicales que no son negocio, como el kala azar.