Desde la escalada de violencia política a finales de junio, el personal de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Cairo ha permanecido en contacto regular con los principales hospitales públicos y privados de la ciudad y de otras áreas afectadas del país. El equipo ha proporcionado suministros médicos y equipamiento a estructuras sanitarias de ambas facciones durante los enfrentamientos.
MSF está en contacto con una red de médicos voluntarios egipcios que están intentando responder a las necesidades directas de las víctimas en los lugares en los que ocurren los enfrentamientos, así como en los hospitales públicos donde se recibe a los heridos. Los equipos de MSF identifican determinadas necesidades específicas, como cierta escasez de medicamentos o material quirúrgico, y provee un apoyo oportuno cuando se requiere. Más recientemente, MSF ha realizado donaciones de drogas, suministros médicos y material quirúrgico al hospital Al Hussein del centro de Cairo, y al hospital Al Arish en la región de Sinaí, al norte del país. También se han realizado donaciones de medicamentos y materiales a un grupo de médicos que maneja una clínica en las zonas aledañas a donde se han registrado los episodios de violencia.
Nuestra prioridad consiste en asegurarnos que el sistema de salud egipcio y la sociedad civil estén pudiendo afrontar adecuadamente la afluencia de heridos, y en que las personas que necesitan asistencia la reciban, dice Mario Stephan, coordinador operacional de MSF. Ha habido una movilización significativa por parte del sistema de salud público y las organizaciones de la sociedad civil, y hasta el momento han podido responder a las necesidades médicas que han ido surgiendo.
Además de los hospitales públicos, organizaciones locales han establecido hospitales de campaña para atender a los heridos. Cuando se registran enfrentamientos, el acceso a las áreas afectadas es extremadamente difícil, incluso imposible, debido a los bloqueos de carreteras y a la inseguridad, dice Stephan. Por esta razón, son generalmente los médicos que están presentes en el lugar de los hechos los que pueden brindar el grueso de la asistencia sanitaria.
En anticipación a las demostraciones del 30 de junio, y antes de esta última ola de violencia, MSF brindó entrenamiento, equipamiento médico y drogas a médicos voluntarios egipcios, para facilitarles una rápida y apropiada respuesta a las necesidades médicas que pudiesen surgir durante las demostraciones. MSF también realizó entrenamientos con el personal del Ministerio de Salud egipcio, centrado en las formas de responder adecuadamente ante una gran afluencia de pacientes heridos.
MSF continúa monitoreando la situación en Cairo y a lo largo del resto del país, y se encuentra preparada para proporcionar más ayuda en caso de nuevas necesidades que puedan surgir.
MSF ha estado presente en Egipto desde 2010 y, además de la actual respuesta de emergencia por los enfrentamientos, maneja dos clínicas dedicadas a la atención materno-infantil en los suburbios de Cairo.