Un barco de Médicos Sin Fronteras (MSF) zarpó el sábado desde Sicilia para reforzar las operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo que lleva a cabo la organización. Este buque adicional tiene como objetivo asistir a las personas que arriesgan sus vidas tratando de llegar a Europa a través del Mediterráneo. El navío cuenta […]
Un barco de Médicos Sin Fronteras (MSF) zarpó el sábado desde Sicilia para reforzar las operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo que lleva a cabo la organización. Este buque adicional tiene como objetivo asistir a las personas que arriesgan sus vidas tratando de llegar a Europa a través del Mediterráneo. El navío cuenta con una tripulación de 26 personas entre las que se incluye un experimentado equipo de rescate y personal médico para facilitar atención sanitaria de urgencia.
El Bourbon Argos, que partió del puerto siciliano de Augusta, facilitará apoyo a las operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo. Este nuevo operativo trabajará en colaboración con el MY Phoenix, un barco operado conjuntamente por MSF y MOAS (Migrant Offshore Aid Station), que comenzó sus operaciones el pasado 2 de mayo. En menos de una semana de misión, el MY Phoenix ha rescatado a 591 personas y ha colaborado en el rescate de 101 más. Las 692 personas que han subido a bordo del MY Phoenix han pasado un examen médico y recibido atención a cargo del equipo sanitario de MSF.
«Al menos 1.750 personas han perdido la vida al intentar cruzar el Mediterráneo desde que comenzó el año. Muchas de ellas huyen de la guerra, la violencia y la pobreza extrema. El número de personas que intentan cruzar el mar aumentará en la temporada de verano motivo por el cual estamos intensificando nuestra respuesta. El objetivo no es otro que hacer frente a esta trágica crisis con esta nave adicional que viene a reforzar las operaciones ya existentes», ha explicado Francois Zamparini, coordinador de emergencia de MSF a bordo del Bourbon Argos.
El equipo de MSF embarcado en el buque está conformado por trabajadores sanitarios (personal médico y de enfermería) y trabajadores especializados (logistas, técnicos de agua y saneamiento y mediadores culturales). Su misión es facilitar atención sanitaria y distribuir artículos de primera necesidad a las personas rescatadas. Los cuidados médicos incluirán exploraciones y análisis así como tareas de estabilización para pacientes especialmente vulnerables así como la transferencia de los casos de urgencia.
El Bourbon Argos tiene capacidad para transportar a 300-350 personas rescatadas y es capaz de maniobrar con rapidez para responder a una llamada de socorro. Con 68 metros de eslora, la nave ha sido específicamente adaptada para realizar actividades de localización y rescate. Se han fijado en cubierta varios contenedores para equipar el barco con salas de urgencia, observación y consulta y espacios específicos para almacén, depósito de cadáveres y sanitarios.
«El creciente número de personas que se ven obligadas a arriesgar sus vidas en el mar es consecuencia de la falta de canales y mecanismos seguros y legales para que las personas puedan migrar y solicitar asilo en Europa. Aunque las operaciones de búsqueda y rescate en el mar son vitales para salvar vidas no van a resolver la situación general a largo plazo. Nuestros equipos en la región mediterránea, tanto en tierra como en el mar, trabajan para proteger vidas y proveer asistencia médica urgente. Y esto será así hasta que la situación sea abordada adecuada y humanamente por la Unión Europea», ha afirmado Aurélie Ponthieu, asesora Humanitaria sobre Migración de MSF.
Durante los últimos 15 años, MSF ha brindado asistencia a migrantes en situación de vulnerabilidad, solicitantes de asilo y refugiados en toda Europa. Además de las operaciones de búsqueda y rescate de los buques MY Phoenix y Bourbon Argos, MSF facilita atención médica a las personas que son trasladas al centro de recepción de Pozzallo, Sicilia. También proporciona primeros auxilios psicológicos en los puertos de desembarque y ofrece apoyo en materia de salud mental en los centros de asilo de la región siciliana de Ragusa. Así mismo, MSF impulsa proyectos de apoyo a migrantes, solicitantes de asilo y refugiados en Grecia y Serbia, prestando atención médica, distribuyendo de artículos de socorro y realizando actividades para la recuperación y rehabilitación de víctimas de tortura.