El campamento de Grande-Synthe, en Francia, tiene capacidad para albergar a 2.500 personas. Apenas hace tres días que se abrió y ya está amenazado de cierre. Sin embargo, para todos los firmantes del presente manifiesto, resulta importantísimo que este campo permanezca abierto. El nuevo campo de Grande Synthe sirve para aliviar, al menos en parte, la angustia diaria que sufren refugiados y migrantes a causa de las duras y precarias condiciones de vida que tienen que afrontar.
Sin embargo, el Gobierno francés parece no tener la misma opinión. Aunque parece obvio que los migrantes y refugiados necesitan alojarse urgentemente en lugares dignos, las autoridades francesas han enviado una notificación oficial al alcalde de Grande-Synthe en la que le informan de que se oponen a la apertura precipitada del campo, argumentando para ello que este campo resulta “perjudicial para la seguridad de cientos de personas”. En lugar de llevar a cabo acciones concretas – muchas de las cuales serían de su responsabilidad – el Gobierno ha optado por meterse en el papel de inspector de construcción. El pretexto para amenazar al alcalde de Grande-Synthe es que el campo no se ha construido bajo determinados estándares, y además, en esta misiva que ha recibido el Alcalde, se hace especial hincapié en los problemas legales en los que éste podría incurrir en el caso de persistir en su empeño de mantener abierto el campo.
Este funcionario público, que ha sido elegido en las urnas por los ciudadanos, merece todo nuestro apoyo y denunciamos la presión que están tratando de ejercer contra él.
La situación no deja de ser irónica. El Estado fue condenado en noviembre de 2015 por no cumplir con sus obligaciones -concretamente en las áreas de salud pública y de provisión de viviendas de emergencia. Y a pesar de ello,
es el propio Gobierno quien busca ahora castigar a quienes trabajamos conjuntamente para paliar las deficiencias que ellos han mostrado.
Es el propio Gobierno quien está poniendo trabas a los que nos esforzamos en ofrecer a los migrantes y refugiados unas condiciones de vida mejores. Hay que recordar que el nuevo campo de Grande Synthe está ubicado en lugar abierto en el que se han instalado refugios sólidos. Éstos proporcionan privacidad a quienes los habitan y cumplen con las condiciones necesarias en materia de salud e higiene.
Por supuesto que todavía queda mucho por hacer. Nadie ha dicho que este nuevo campamento en Grande-Synthe resuelva todos los problemas o que cumpla con los requisitos legales más estrictos. Pero dada la urgencia de la situación, la prioridad en este momento se centra en proporcionar refugio y garantizar unas condiciones mínimas para que los migrantes y refugiados tengan una vida digna. Ahora depende de nosotros – ONG, grupos de ayuda y voluntarios – asumir la responsabilidad de gestionar este lugar, que fue elegido por pura necesidad. Está en nuestras manos y en las de los propios refugiados y migrantes, con ayuda de los habitantes de la región, el que transformemos este sitio en un lugar donde todas estas personas puedan olvidar, aunque sea brevemente, todo el sufrimiento que llevan acumulado.
Firmantes iniciales:
Cruz Roja Francesa
LDH – Liga de los Derechos del Hombre