Desde el 14 de mayo, los combates entre las fuerzas del ejército sudanés y el Ejército Popular de Liberación de Sudan (SPLA por sus siglas en inglés) han devastado la ciudad de Abyei, que ha quedado prácticamente destruida. Casi toda la población local ha huido al norte y al sur de la ciudad en busca de refugio. Antes de los enfrentamientos, Abyei, situada en el centro de Sudán, y sus alrededores tenían una población de 130.000 personas, pero casi 60.000 ahora se han visto obligadas a desplazarse.
Debido a la violencia, a los habitantes de la ciudad nos les ha quedado otra elección más que abandonar sus hogares y todas sus pertenencias. Ahora en el punto más álgido de la época de lluvias, las condiciones de vida de estos desplazados es deplorable; existe la necesidad urgente de abrigo y la situación nutricional se está deteriorando rápidamente. El día del ataque, en el centro nutricional de MSF en Abyei, los equipos estaban ofreciendo tratamiento a 700 niños con malnutrición, incluyendo 80 con malnutrición severa que habían sido admitidos antes de que estallasen lo combates. Desde que se produjo el desplazamiento sólo se ha conseguido localizar a algunos de ellos que ahora han sido readmitidos en el programa nutricional.
Los violentos combates en la ciudad, la huida a pie o en camión, y las precarias condiciones de vida actuales de la población no pueden más que agravar la situación médica y nutricional. En las zonas donde han sido desplegados los equipos de MSF, el flujo de personas también supone un importante problema de acceso a agua potable.
El pánico era tan generalizado que nadie tuvo tiempo de coger nada ni incluso pensar en su propia familia. Estamos deseando tener noticias de algunos de nuestros trabajadores sanitarios que no pudieron huir a tiempo, afirma Inma Vázquez, coordinadora general de MSF en Sudán.
MSF, que trabaja en el hospital de Abyei y sus alrededores desde 2006, ha tenido que evacuar a algunos de sus trabajadores. Sin embargo, un equipo de 11 personas, incluyendo a un cirujano y a un anestesista, ha sido enviado a Turalei y a Agok para apoyar a los desplazados, proporcionando instrumental quirúrgico y material de primeros auxilios a fin de cubrir las necesidades de 2.000 familias y material para purificar el agua para unas 10.000 personas. En estas dos ciudades, MSF ha asistido a 114 heridos. En el hospital de Turalei, de sólo 40 camas, los equipos de MSF han instalado tiendas como estructuras médicas de emergencia.
Como los ataques continúan en Abyei, un número cada vez mayor de familias que requieren la asistencia de MSF siguen llegando a las zonas al norte y sur de la ciudad. Otro equipo de emergencia está intentando llegar a la población concentrada en el norte hacia Muglade y Heglige, donde también se ha reportado la presencia de desplazados y heridos.
MSF trabaja en Sudán desde 1996 y actualmente está presente en todas las zonas del país. MSF es una organización médica de emergencia independiente que suscribe los principios de imparcialidad y neutralidad.