Tras el bombardeo el pasado lunes 15 del hospital de Abs en el que murieron 19 personas y 24 resultaron heridas, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha decidido evacuar a su personal de los hospitales que apoya en las gobernaciones de Sada y Hajjah, en el norte de Yemen. Concretamente, la organización médico-humanitaria ha trasladado su personal de los hospitales de Haydan, Razeh, Al Gamouri, Yasnim, en Saada, y de los centros hospitalarios de Abs y Al Gamouri, en Hajjah. El ataque contra el hospital de Abs es el cuarto y el más mortífero sufrido por una instalación sanitaria apoyada por MSF en un conflicto en el que las agresiones contra las estructuras y los servicios médicos han sido incontables.
Desde el fracaso de las conversaciones de paz entre la Coalición liderada por Arabia Saudí y las fuerzas hutíes en Kuwait hace 11 días, la Coalición ha reanudado una intensiva campaña de ataques aéreos que, una vez más, ha convertido extensas zonas de Yemen en frentes de batalla.
En los últimos ocho meses, MSF ha mantenido dos reuniones con funcionarios de alto rango de la Coalición en Riad para asegurar la asistencia médico-humanitaria para la población yemení y pedir garantías de que se detendrían los ataques a los hospitales. Sin embargo, los bombardeos han continuado a pesar de que MSF ha compartido de forma sistemática las coordenadas GPS de los hospitales en los que trabajamos con todos los actores implicados en el conflicto.
Representantes de la Coalición han afirmado, en reiteradas ocasiones, que respetan el Derecho Internacional Humanitario. Sin embargo, este ataque demuestra el fracaso y la incapacidad para controlar el uso de la fuerza y evitar ataques sin previo aviso sobre hospitales repletos de pacientes. MSF no está satisfecha ni le resulta tranquilizadora la declaración de la Coalición en el sentido de que el bombardeo ha sido un error.
Dada la intensidad de la actual ofensiva y la pérdida de confianza en la capacidad de la Coalición para evitar este tipo de ataques fatales, MSF considera que, en las circunstancias actuales, los hospitales de las gobernaciones de Sada y Hajjah son inseguros tanto para los pacientes como para el personal. La decisión de evacuar de un proyecto a los equipos, de los que forman parte médicos, obstetras, pediatras, cirujanos y especialistas en urgencias, nunca se toma a la ligera. Sin embargo, ante la falta de garantías creíbles por parte de los actores en conflicto de que respetarán el estatus de protección de las instalaciones médicas, los trabajadores sanitarios y los pacientes, no queda otra opción que evacuar al personal. Este es el caso de las gobernaciones de Hajjah y Saada tras los recientes acontecimientos.
Aunque sigue siendo necesaria una investigación independiente, debemos subrayar que las investigaciones anteriores de la Coalición relacionadas con las instalaciones de MSF no han sido compartidas con nosotros. “Este último incidente muestra que las actuales reglas de compromiso, protocolos y procedimientos militares son inadecuados para evitar los ataques a hospitales. Por tanto, es necesario hacer una revisión y aplicar cambios a dichos procedimientos «, afirma Joan Tubau, el director general de MSF.
La organización pide a la Coalición liderada por Arabia Saudí y a los gobiernos que apoyan dicha Coalición, sobre todo Estados Unidos, Reino Unido y Francia, que garanticen la aplicación inmediata de medidas dirigidas a incrementar sustancialmente la protección de los civiles.
Los hospitales que MSF apoya en Saada, Haydan, Razeh, Abs, Yasnim y Hajjah continuarán operando con personal del Ministerio de Salud y voluntarios. Estos hospitales ya están haciendo todo lo posible para mantenerse operativos y responder a las necesidades médicas provocadas por los renovados bombardeos y las dificultades creadas o agravadas por las carencias que sufre la población yemení. MSF pide a todas las partes enfrentadas que garanticen la seguridad de estos hospitales y permitan que sigan proporcionando asistencia médica de forma neutral e imparcial.
MSF lamenta profundamente las consecuencias de esta evacuación para nuestros pacientes y nuestros colegas médicos del Ministerio de Salud de Yemen que continuarán trabajando en las instalaciones sanitarias en condiciones extremas. Esperamos que las circunstancias de seguridad mejoren, den un respiro a la población y permitan a los equipos de MSF volver a la zona para proporcionar una atención médica tan necesaria en estos momentos. MSF lamenta el fracaso colectivo de proteger a los civiles yemeníes de la acción militar y también el fracaso para ayudarles con la respuesta humanitaria adecuada.
MSF condena la forma en la que todos los actores implicados, la Coalición liderada por Arabia Saudí, los hutíes y sus aliados, están llevando a cabo esta guerra en la que se suceden ataques indiscriminados y una falta total de respeto por la población civil.
MSF quiere, una vez, más transmitir sus más sinceras condolencias a las familias de nuestro compañero y de los pacientes que murieron en el ataque al hospital de Abs. La muerte del personal médico y los enfermos y heridos dentro de un hospital habla de la crueldad y de la inhumanidad de esta guerra.
En Yemen, MSF lleva a cabo actividades en 11 hospitales y centros de salud y brinda apoyo a otros 18 centros y clínicas en ocho gobernaciones: Adén, Al-Dhale, Taiz, Saada, Amran, Hajjah, Ibb y Saná. En la actualidad, MSF cuenta con más de 2.000 trabajadores en el país, incluyendo 90 trabajadores internacionales.